Nos encanta poder arreglar las cosas en un plis y curarnos de forma rápida erradicando los síntomas sin ni siquiera entender las causas del problema. Sin embargo, los cambios duraderos provienen de un proceso más profundo en el que tenemos que analizar nuestros pensamientos y acércanos a nuestras emociones con compasión. En otras palabras, un verdadero cambio, incluido un cambio en tu vida sexual, requiere un enfoque holístico y un compromiso diario.
Las claves para mejorar tu vida sexual son la conexión (contigo misma y con tu pareja) y la seguridad emocional. A partir de ahí, te propongo siete puntos para mejorar tu vida sexual:
La palabra “perfecto” proviene de un resultado externo impuesto y si entra en tu vocabulario, no vas por buen camino.
No puedes centrarte en un objetivo que hay que lograr porque un modelo lo dice. No son tus estándares y cada uno tiene su propia experiencia.
El sexo no se resume al coito, sino que incluye una infinidad de otros gestos como besarse, tocarse, mirarse, etc.
Eres tú la quiere tiene que encender tu propio fuego, no tu pareja. La conexión sexual entre dos personas surge cuando dos llamas se encuentran y crean juntos un fuego más intenso.
Nuestras hormonas, nuestro sueño, nuestra dieta y nuestra actividad física pueden influir considerablemente sobre nuestro deseo sexual.
El sexo es una práctica que requiere que conectes con tu conciencia y con el presente, sin juzgarte.
Sin confianza ni seguridad, el cuerpo se tensa. Por eso, para unas relaciones sexuales plenas y satisfactorias, es primordial conectar con tu pareja a nivel emocional, espiritual y físico.
Si tu cuerpo se cierra, eso significa que algo falla contigo y/o con tu pareja. Pero si tu relación es sana y sincera, seguiréis creciendo juntos y aprendiendo sobre vuestra intimidad, sin compararos.