¿Sueles esperar la aprobación de la gente que te rodea para cualquier cosa que hagas? ¿Te suele preocupar no estar a la altura para otras personas? Si contestas “si” a estas dos preguntas, es hora de hacer unos cambios si no quieres depender de la opinión y del juicio de los demás. Aprende a aprobarte y a prestarte toda la atención que siempre esperas y necesitas.
Las dos claves para la auto-aprobación:
Primero, tienes que acceder a tu esencia, a quien eres de verdad, a tu lado espiritual, para poder creértelo. Sólo tienes que imaginar un “tú” más mayor y más sabio que tú. Sólo esa versión de ti misma podrá revelar quién eres realmente. Piensa que eres como una niña pequeña y que ese tú mayor te adora y te enseña tu esencia, sin juzgarte.
El segundo paso consiste en la forma en la que te tratas. Deja de juzgarte, de ignorar tus sentimientos, de llenar los vacíos con adicciones y de culpar a los demás por todo. Es esencial que aprendas a tratarte como tratarías a un ser querido. Cuanto más aprendas de ti, te ames y te apruebes, más te aprobarán y te querrán los demás. Al no quererte, invitas a que las personas que te rodean no te quieran tampoco. La energía que desprendes envía mensajes a tu entorno para que te aprueben o no.
Parece muy simple y sí, lo es. Te aseguro que aprender a quererte es la clave para que te quieran y te traten como te lo mereces. En definitiva, es la clave para unas relaciones felices y sanas.