Si eres de estas personas que dejan sonar el despertador durante media hora antes de levantarse, que maldicen a todos los que les rodean cuando ponen un pie en el suelo y que no soportan que los demás les hablen, definitivamente, no eres una persona mañanera. Por eso, te propongo una rutina de sólo 10 minutos para ayudarte a llevar de manera más positiva el levantarte sin fruncir el ceño.
Los beneficios de la música son muy numerosos, y más aún si cantas, porque te centras en la canción y eso te distrae de todo lo que te supone la mañana, además de obligarte a respirar profundamente. Por lo tanto, búscate alguna canción alegre y despierta la casa.
Se ha demostrado que mirar imágenes de momentos felices ayuda a aumentar las emociones positivas, la tranquilidad y la felicidad. Así que no dudes en entrar en Facebook y buscar unas fotos que te recuerden momentos de risas con amigos o familiares.
Sonreír manda una señal positiva a nuestro cerebro y nos hace sentir mejor. Incluso una sonrisa forzada tiene sus beneficios, por lo tanto, piensa en algo gracioso o dibújate una sonrisa en la cara y eso te aliviará los efectos de la mañana.
Un acto de bondad es tan beneficioso para el que lo hace, el que lo recibe e incluso para el que lo ve. Por eso, no dudes en ayudar a alguien, sea dando algo de comer a alguien que lo necesitas cuando vas a trabajar o dejar una nota bonita a tu pareja.
Este ejercicio te permitirá sentirte más positiva enseguida ya que tu cerebro se centrará automáticamente en los aspectos positivos de tu vida, y lo puedes incluso hacer desde la cama antes de levantarte.
Coge un papelito y apunta:
Tal vez no te conviertas en la persona más mañanera del mundo, pero seguro que, con estos trucos, te costará un poco menos levantarte y empezar el día con una sonrisa.